Overblog
Seguir este blog Administration + Create my blog
7 marzo 2013 4 07 /03 /marzo /2013 15:03

Son las 08.30 de la mañana y una preciosa chica morena con su uniforme perfectamente planchado hace acto de presencia con una gran sonrisa por la puerta de mi habitación.

Abre la persiana, entreabre la ventana y me deja en la mesita una bandeja con mi desayuno, La verdad es que la vistas que tengo desde la ventana de mi habitación son inmejorables, aún me acuerdo de todo lo que tuve que luchar para estar viviendo donde estoy y abrir los ojos  y poder ver el mar ¿Qué más se puede pedir? Hacía mucho tiempo que una mujer no me traía el desayuno a la cama, la última persona que lo hizo fue Blanca, mi mujer, hace ya unos años, antes de que decidiera hacer un largo viaje para no volver.

Han pasado ya veinte minutos y otra mujer del servicio, no tan atractiva como la anterior, se lleva la bandeja soplando y con las manos de su uniforme remangadas hasta la altura de sus codos.

La ventaja  de tener servicio es que no me tengo que preocupar de nada, ellos están allí para satisfacer todas mis necesidades. Hablando de necesidades, necesito ir urgente al servicio y Quique no ha venido todavía. Quique es el único hombre que tengo en el servicio. Me echa una mano en la difícil tarea de tener 80 años y estar atado a esta maldita guillotina con ruedas que empieza a formar parte de mi vida para hacer una cosa tan simple como la de tener cubiertas mis necesidades.

Ha pasado más de una hora y una vez acabadas todas las tareas matutinas me vuelvo a tumbar en la cama. Hoy no me encuentro bien, apenas he tocado el desayuno y sólo tengo ganas de cerrar los ojos.

Pasan los minutos y de repente veo a mano izquierda una botella que va dejando caer gota a gota un líquido transparente, me cuesta respirar, vuelvo a abrir los ojos y entre una especie de nebulosa llego a ver el rostro de una cara que me es muy familiar. Mis recuerdos empiezan a aflorar, tengo frío y calor, miedo y alegría, no puedo respirar, vuelvo a cerrar los ojos, no quiero abrirlos. Quiero irme, irme lejos, pero esta vez para no volver, vuelvo a abrir los ojos, supongo que esta vez será la última, mi última lágrima, mi último aliento, mi último latir, mi último suspiro, mi último parpadeo… cierro los ojos, sonrío y me voy feliz.

HOSPITAL.jpg 

Compartir este post
Repost0
5 marzo 2013 2 05 /03 /marzo /2013 15:04

Los pasos de mi desmañado y viejo labrador llamado Big Mac me hace torcer la esquina hacia la Pastelería del señor Ramón; El señor Ramón llevaba treinta años levantándose a las cuatro de la mañana para hacer pan, crear multitud de pasteles y todo tipo de bollería que uno pudiera llegar a imaginar, me encantaba asomarme por la ventana que el señor Ramón dejaba estudiadamente entre abierta y sentir ese golpear de aire caliente que hacía despertar mis viejos y juveniles instintos culinarios del pasado.

 

Una vez llegado al parque que se encontraba justo detrás de la pastelería, el silencio fue roto por el fuerte golpear del agua contra el oxidado columpio donde yo hacía años intentaba atrapar las nubes alargando mi corto y regordete brazo cada vez que mi amigo Roberto me empujaba fuertemente.

Roberto, pobre Roberto, los buenos momentos que pasamos en ese parque, quien nos iba a decir que pasado unos años, en ese mismo parque sentando en un banco pintado de corazones con flechas, nombres de chica y fechas dispares iba a perder la vida de una sobredosis.

Sigo caminando entre malas hierbas y malezas y decido soltar a Big para que él mismo pueda ser libre durante lo que yo tardo en fumarme un cigarrillo, pese que éste maldito viento se ha propuesto impedírmelo.

 

Me refugio bajo el tejado de una casa donde hacía años nos resguardábamos del frio y la lluvia y dejábamos pasar el tiempo jugando al Monopoly, al Gran Hotel o jugándonos los cromos al nombre más largo sin importarnos en el equipo donde jugaban esos héroes con medias y pantalones cortos.

De la misma forma que empezó a llover ahora lo ha dejado, pero parece que eso a Big no le importa ya que lo veo trotar hacia mí moviendo su cola, rebozado de barro y con algo entre los dientes, una vieja pelota amarilla de tenis Dunlop.

El silbido del viento me hace recordar los días que no había respetado la hora de llega da y mi padre me llamaba con un silbido y yo subido a una pared de ladrillo  le decía que me dejara un ratito más, que íbamos dos a dos y que nos costó mucho remontar, que ahora no podíamos dejarlo, pese que apenas podíamos distinguir los dos árboles que nos hacían de improvisadas porterías debido a la oscuridad de la noche.

 

Este maldito y  amenazador paso del tiempo, no impide que ahora mismo me encuentre en el mismo sitio, rodeado de los mismos aromas y recuerdos, con los zapatos enfangados como antaño, con mi compañero Big ahora un poco más cansado, fumando, sin tenerme esta vez que esconderme de nadie y con el sonido del viento que hace resucitar la imagen de mi padre que lleva ya muchos años sin asomarse a esa ventana llamada preocupación.

 

 

parque

 

 


Compartir este post
Repost0
23 enero 2013 3 23 /01 /enero /2013 08:41

Mis lentos pasos me llevan inconscientemente a la habitación en la cual se encuentra mi vieja y arrugada mesa de madera amarillenta, me deshago de la  silla, me siento bruscamente y apoyo la encorvada espalda en el frio respaldo de mi solitaria silla.

Han pasado unos minutos que para mí se convierten en horas, me encuentro con la mirada fija frente a este maldito folio blanco desafiante y amenazador. Las arrogantes agujas del reloj se quejan a medida que van avanzando y repiten su camino una y otra vez: Tic Tac, Tic Tac.

No encuentro las palabras adecuadas para unirlas entre sí para poder decir lo que realmente siento por dentro, ¿Cómo puedes escribir acerca de algo que no existe pero que sabes que empieza a formar parte de ti…?

 

Empiezo a escribir y lo que queda reflejado no me convence, pasan los minutos y una multitud de bolas de papel me rodean como a un vulgar ladrón de palabras, palabras que hoy asoman vergonzosas, sin ningún sentido y sin ninguna razón de peso para que conviertan en símbolos inmortales ¿Me dejaron huérfano las musas? Pasan las horas y el sonido del despertador me recuerda que debo volver del mundo de las letras y de los sueños, muevo levemente mi cabeza, son las seis de la mañana, tengo frio y estoy cansado; hoy es Miércoles, y como cada día, voy a pasar  lo que me queda de día entre cuatro barrotes, barrotes que sólo existen dentro de mí porque realmente no me gusta hacer lo que hago ni me gusta la gente con la que estoy , pero las cadenas de mi obligación hacen que me falte el valor para huir y no echar la vista atrás…y correr….y correr….y correr para nunca más volver.

Compartir este post
Repost0
16 enero 2013 3 16 /01 /enero /2013 15:07

 

Las ocho campanadas de la puerta del sol me despertaron del profundo letargo del cual mi cuerpo estaba inmerso.

Hace un día primaveral en el Madrid de las oportunidades o eso me dijeron cuando tomé la decisión de venir con mi familia y dejar mi tierra y convertirme en otro muñeco roto con unos sueños efímeros.

Sueño, palabra de cinco letras tan sencilla de pronunciar y a la vez tan difícil de poder realizar.

El sueño, eso es lo que me hizo venir a Madrid, el sueño para establecer a mi familia, para dar una educación a mis hijos, para crecer como persona y hacer feliz a mi mujer, todo eso es lo que me hizo arriesgarme a tomar la decisión más importante de mi vida.

¿Y qué sucedió? , pues muy sencillo, que los sueños se convirtieron en pesadillas y mi vida en un gran castillo de naipes bañado por el alcohol, la traición, las injusticias y porque no decirlo, por mi ingrediente estrella, por un poco de mala suerte. Pero tiempo al tiempo, los detalles más adelante.

Empecé a recoger mis sábanas de cartón, las puse debidamente dobladas junto al contenedor de reciclar el plástico y comencé a caminar hacia mi triste y desolador día.

Mi primer destino era el Centro de Día llamado “Puerta Esperanza” de la calle Alcalá, allí es donde se hacia el mejor café de todo Madrid.

Esa mañana el comedor estaba abarrotado y la cola daba la vuelta a la manzana, era demasiado tarde y creo que me desperté en la campanada equivocada.

Pasada una hora llegó mi turno, como siempre, allí estaba ella, sonriente, bella , radiante como si estuviera sirviendo al mismísimo ministro.

  • Buenos días Daniel!!!
  • Buenos días Lola, ¿Qué tal estás?
  • Muy bien, aquí como cada día, ya me conoces ¿Y tú? ¿Cómo has pasado la noche?
  • Bien, asentí, un poco incomodas las sabanas de satén, pero bien…

Ella sonrió, me encantaba verla reír, era una mujer no demasiado atractiva pero su sonrisa era cautivadora, realmente era lo mejor del día, ella, su sonrisa y esos ojos llenos de vida, vida que yo no tenía.

  • Por cierto, ya estoy acabando el libro que me recomendaste Daniel, hoy lo acabo, y mañana lo comentamos…

En mi vida real (porque pienso que mi vida actual tiene que ser una pesadilla) trabajaba dando clases de Literatura en la Universidad Autónoma de Barcelona y pese a mi actual aspecto desaliñado y descuidado, todavía no se me ha olvidado leer.

El problema que tengo ahora es que no me dejan entrar en las Bibliotecas Públicas, pese a que como su mismo nombre indica son públicas.

Debido a este problema, tengo un “trato” con mi particular Dulcinea  la cual me deja algún que otro libro y alguna otra revista pese al riesgo que corro, ya que mis compañeros de callejón en vez de ver Literatura ven combustible para pasar las frías y eternas noches de Invierno.

  • Por lo rápido que estás leyendo, creo que te está gustando ¿No es verdad?, le dije yo...
  • Sí, la verdad es que está muy interesante, lo que pasa es que me cuesta mucho leer a Calderón, es normal ¿verdad?
  • Si, tranquila, ya te acostumbras, al principio es normal

La magia se truncó cuando un grito que surgía de la cola vociferó que tenía hambre y eso me recordó donde me encontraba, la cola avanzó y la cara angelical se perdió en el mostrador de las magdalenas....

Compartir este post
Repost0
11 enero 2013 5 11 /01 /enero /2013 22:21

Han pasado muchos años desde que dejé a mi amigo Coraje, Coraje se fue para no volver y a día de hoy aún lo estoy esperando,muchas veces cuando me encuentro durmiendo con la triste Decepción y oigo el timbre sonar ,bajo corriendo las escaleras, abro la puerta y espero que sea mi viejo amigo. Pero la gente sigue pasando de puntillas por mi vida y sin apenas hacer ruido. Muchas gracias mi vieja Esperanza, gracias por seguir a mi lado porque sin ti creo que no podría seguir este camino que no sé donde me va a llevar. Muchas gracias por hacer que desaparezcan los tenebrosos Miedos de la noche.

Muchas gracias mi mágica Creatividad porque si no tuviera un papel en blanco frente a mí donde vomitar todo lo que siento y lo que pienso la desesperación pudriría mi ser. No tengo miedo a la Derrota, es más, cuando aparece, le miro fijamente a los ojos pensando que aunque me venza, tengo todavía el día siguiente para seguir buscando lo que quiero.

Ahora con 37 años busco la Alegría en los pequeños rincones de este regalo que es respirar cada día, el olor a café un sábado por la mañana, una sonrisa, un abrazo por las mañanas, una fotografía, una puesta de sol, una canción, un beso, coger el coche sin un rumbo fijo o un simple gracias.

Sé que estas cerca, lo tienes que estar, simplemente no me oyes, pero sé que un día vendrás, y al final lograré mi sueño.

 

 

IRLANDA-34.jpg

Compartir este post
Repost0
9 enero 2013 3 09 /01 /enero /2013 19:49

Desde el primer momento en que nací hombres y mujeres se cruzaron en mi vida, unos sin hacer apenas ruido y otros siguen formando parte de mi vida, la primera mujer con la que empecé a compartir mi vida se llamaba inseguridad y es lo que sentí nada mas ver la luz, ella era hermosa pero un poco indecisa y debido a ella lo primero que hice fue llorar, todavía a veces viene a hacerme una visita, por suerte, cada vez menos, pero se hace más latente en los momentos más importantes de mi vida hasta que después se me cruzó amor, ella me dió el calor de unos padres primerizos y hasta el día de hoy sigue conmigo, a mi lado, pese a que hubo una época en la que desapareció de mi lado, pero por suerte cada vez que abro los ojos por la mañana la veo junto a mi.

A medida que me iba haciendo mayor la oscuridad formó parte de mi vida y me hice amigo de un señor  llamado odio con el que me iba de bares y me emborrachaba por no conseguir  lo que me proponía. Odio no era un buen compañero de viaje pues me dejaba en casa sin apenas acordarme de lo sucedido, hasta que al día siguiente me llamaba la insoportable  depresión para quedar conmigo, pero yo no quería salir y empecé a encerrarme en mi mismo  y a salir con soledad, una chica muy suya  y un poco egocéntrica que le molestaba compartirme con los demás  y poco a poco empezamos a formar nuestro propio universo, universo lleno de sueños ,de metas y deseos no cumplidos. De vez en cuando me gusta estar con ella, creo que todos en esta vida necesitamos estar  algún día con ella, siempre y cuando la llames tú y no aparezca.

Pasada la pubertad empecé a compartir mi vida con coraje, él era un hombre fuerte, rudo, seguro y quizás un poco arriesgado pero me ha enseñado a apretar los dientes y tomar caminos desconocidos y oscuros, pese saber que el final sería muy negativo para mí.

Estas son las personas que conocí en la primera etapa de mi vida y no me arrepiento de todo lo que hice y que hubieran formado parte de mi vida

 

 

  sd-135 

Compartir este post
Repost0
18 abril 2012 3 18 /04 /abril /2012 19:14

Son las siete de la mañana, y como cada mañana mis pies desnudos besan el frío suelo de la habitación, abro lo persiana y está lloviendo, mi mente durante unos segundos se plantea si no es mejor seguir durmiendo que levantarme para ir a trabajar. Tengo treinta y cinco años, trabajo de contable en una multinacional y lo más cercano a una relación es la conversación que tengo todas las mañanas mientras desayuno con mi gato persa llamado Cat, y sí, es cierto, no soy nada original.

Unos minutos más tarde cojo el ascensor, me miro en el espejo y veo que cada vez tengo menos pelo y las canas están haciendo acto de presencia, y realmente más que un contable parezco un escritor bohemio o un pintor que se pasa las horas frente a un mar lleno de dudas.

Salgo a la calle, abro el paraguas y veo que un par de varillas están dobladas, vuelvo a cerrar el paraguas y decido salir corriendo al Metro; bajo las escaleras, siempre cojo el Metro en Clot. Me gusta pasear y subir por Vía Layetana, pero debido al día que hace lo cojo en Jaume I, hoy hay mucha gente...

De pronto a lo lejos oigo unas de mis canciones favoritas cantadas por una voz portentosa de mujer acompañada por unos vergonzosos acordes de guitarra, - Dios!!! qué preciosidad pienso yo, la canción es "Some one like you" de Adele...

Mis pasos se aceleran a lo largo del pasillo del metro, mis hombros se rozan con otros hombros y mis pies son pisados por otros pero eso a ellos  no les importa, como un Ulises cualquiera la voz de aquella sirena del metro me embauca y me hipnotiza y me hace acelerar aún más el paso antes de que la canción acabe...

Cuando giro a la izquierda me encuentro a una chica de mediana edad, morena, con un gorro de lana en la cabeza ,unas gafas oscuras y una sudadera negra que pone "I love NY".

Me paro frente a ella, mis ojos abiertos como platos se fijan en esos acordes, en esa voz y…y en esa cara…acaba la canción y mi cuerpo apenas se ha movido, la chica me sonríe mientras yo continuo allí, igual que una estatua de la Rambla. Después de unos segundos mi cuerpo reacciona, yo le sonrió y le dejo cinco euros a la vez que mis labios articulan la palabra “preciosa”, ella ruborizada y sonrojada me contesta, - gracias…la verdad es que son unos acordes preciosos… yo me acerco y le digo susurrando…- No hablaba de la canción…

A partir de ese día mis días dejaron de ser grises, ya no me miraba en los espejos de los ascensores, usaba chubasquero y hablaba con los perros. Han pasado cinco años desde que me casé con Alba,  y soy feliz… Por cierto ella es invidente y es la persona más maravillosa que he conocido jamás y nunca olvidaré ese día en el Metro rodeado de notas en un ciego Pentagrama.


PENTAGRAMA.jpg

Compartir este post
Repost0